La vestimenta en el lugar de trabajo nunca ha sido tan informal Debido a que la pandemia mundial ha mantenido a la gente fuera de la oficina, y sobre todo en sus casas, los pijamas y la ropa deportiva se han convertido en los nuevos pantalones y camisas. La cuestión es que, a medida que aumenten las tasas de vacunación y la gente empiece a volver al trabajo, ¿estará esta dispuesta a desprenderse de sus pantalones de chándal? La respuesta corta: sí y no. Jeff Galak, profesor asociado de marketing en la Escuela de Negocios Tepper de la Universidad Carnegie Mellon, afirma que hay dos resultados probables: Uno, algunas empresas mantendrán el impulso de la ropa informal y nacerá una nueva normalidad. Dos, podría haber un fuerte deseo de volver a la «normalidad» anterior a la pandemia. Por mucho que los pantalones de chándal y las camisetas sean maravillosos cuando se trabaja desde casa, este señala que volver a la ropa informal de negocios o incluso a la ropa de oficina tradicional -¿recuerdas los trajes y las faldas? – podría ser un recordatorio psicológico de que estamos dejando la pandemia atrás.
