Desde 2003, Graf von Faber-Castell, ha presentado a modo de estilográfica, una colección especial denominada “Pen of The Year” (La Pluma del año) hecha con materiales exclusivos. Esta edición en especial, ha tomado un lugar preponderante en los corazones de los aficionados. Cada edición limitada cuenta la historia de eras y personajes que le han dado forma al desarrollo de la humanidad, en esta ocasión es el turno de LOS AZTECAS.

Los aztecas: inspiración para La Pluma del Año
La Pluma del Año 2022, está inspirada en la cultura, la estética y los rituales religiosos de los aztecas. Su poderoso imperio se basó en la alianza de tres ciudades-estado creado en 1428 en lo que ahora es México. La cultura azteca produjo impresionantes obras de arte, un sistema político moderno y una cosmovisión llena de leyendas que todavía fascinan a quienes las escuchan a modo de eco inquebrantable.
La estilográfica: cosmovisión y lujo en una pluma fuente
El barril metálico de esta edición especial, con su revestimiento en tono gris antracita, (Diamond Like Carbon) muestra un impresionante patrón de una calavera que nos remonta a los impenetrables muros del Templo Mayor, donde las hileras de cráneos humanos sobresalen de la impactante estructura.
El Templo Mayor es un mudo testigo de un sitio sagrado donde los aztecas ofrecían sacrificios humanos a sus dioses para asegurar la salida del sol.
La empuñadura del instrumento de escritura está hecha de obsidiana, lisa y oscura. Esta roca volcánica fue utilizada para hacer puntas de flecha y espadas por los aztecas y no solo servía para defenderse del enemigo, sino también contenía un significado espiritual, ya que se utilizaba como amuleto de protección contra los malos espíritus.

Los adornos en turquesa ubicados en los extremos de La Pluma del Año, logran una remembranza de lo que esta piedra preciosa honrada por los aztecas simbolizaba como uno de sus tesoros más valiosos. Si se observa con detenimiento, se encontrará en el relieve grabado en la piedra un águila, o posiblemente se trate del dios del inframundo vestido con plumas. Estos detalles y sus destellos encarnan el poder y la estética de una cultura siempre viva.
El capuchón encanalado nos remonta a un acercamiento de un nopal y no solo eso; también trae a nuestros tiempos, a los antiguos aztecas. Según la profecía, los aztecas encontrarían su nuevo hogar en un lugar donde observaran a un águila posada sobre un nopal, devorando una serpiente.
Es así como este capuchón evoca a la antigua Tenochtitlán, donde la civilización de los aztecas emergió alrededor del año 1320; estamos hablando del lugar donde hoy se encuentra la cosmopolita Ciudad de México.

Piezas numeradas: dignas de una edición limitada
El plumín magnum de oro de 18 quilates de la estilográfica, recubierto de rutenio y trabajado a mano, promete una experiencia de escritura única. La edición exclusiva The Pen of The Year para este 2022, «Los Aztecas» está limitada a 375 estilográficas y 125 bolígrafos roller. Cada uno se presenta en una caja de madera en un color negro, muy pulido. Las piezas son únicas, numeradas individualmente y contienen un certificado firmado por el Conde, Charles von Faber-Castell para validar su autenticidad.
Historia y cultura Azteca
La piedra del sol
La histórica Piedra de los Cinco Soles, emblema de una cultura rica, inteligente y trascendente, pesa 24 toneladas y fue encontrada cerca del Templo Mayor en la Ciudad de México, la antigua Tenochtitlán. Los símbolos en ella dividen la edad cósmica en cinco ciclos, cada uno de los cuales estaban regidos por un “Sol”: El Sol del Jaguar, el Sol del Viento, el Sol de la Lluvia, el Sol del Agua y nuestro mundo actual: El Sol del Terremoto.
Escritura y cultura: los códices
Los aztecas utilizaron códices para registrar sus manuscritos pictóricos y así enseñar desde una edad muy temprana a las futuras generaciones sin importar su estatus; todos, niños y niñas, podían acudir a los centros de enseñanza. “La gente del sol” documentó eventos históricos, fechas de calendario, información sobre tributos y ascendencias, así como la leyenda de la creación de la Tierra en forma de coloridos y recurrentes pictogramas que hasta hoy, se siguen estudiando.
Volcánica y cristalina: la obsidiana
Oscura, vidriosa y suave: la obsidiana es un vidrio volcánico natural creado cuando la lava se enfría rápidamente. La empuñadura de La Pluma del Año 2022, contiene detalles de esta fría piedra mate.
En la era esplendorosa de los aztecas, los plebeyos solían fabricar espadas, puntas de lanza o de flechas con este material afilado. En la mitología, Tezcatlipoca (TEZ) el dios del norte, porta ropas hechas con la piel del jaguar y empuña un cuchillo de obsidiana.
El Sol Jaguar
La leyenda cuenta que gigantes humanos poblaron este primer mundo en la era del Sol Jaguar, personificado por Tezcatlipoca (TEZ). Estos gigantes podían arrancar árboles con sus manos desnudas, así se crearon nuevos dioses, entre ellos los dioses del agua, Tláloc (TLA) quien también era el dios de la lluvia y la fertilidad terrenal y Chalchiuhtlicue (CHA), la diosa de los lagos, ríos y océanos. Sin embargo, estalló una pelea entre Quetzalcóatl (QUE) y Tezcatlipoca (TEZ), durante la cual, Quetzalcóatl (QUE) envió a Tezcatlipoca (TEZ) del cielo al mar. En su furor, Tezcatlipoca (TEZ) se transformó en un poderoso jaguar y ordenó a su manada de jaguares, que devoraran a todos los gigantes humanos, acabando así con el mundo del Sol Jaguar.
El Sol del Viento
En el segundo ciclo solar, gobernado ahora por Quetzalcóatl (QUE), la Tierra estaba poblada por gente que no era muy civilizada, incluso hubo una crisis y dejaron de adorar a sus dioses. En respuesta, el dios Tezcatlipoca (TEZ) transformó a estos seres en monos, sin embargo, su antiguo adversario Quetzalcóatl (QUE), también conocido como “Serpiente emplumada”, había adorado
verdaderamente al pueblo imperfecto, tanto así que, en un ataque de ira, desató un poderoso torbellino que voló a todos los monos, poniendo fin al mundo del Sol del Viento.
Templos, sacrificios y calaveras
El barril en gris carbón de La Pluma del Año tiene un recubrimiento similar al diamante. Los muros del Templo Mayor, con hileras casi infinitas de cráneos humanos, son la inspiración el diseño.
Los sacrificios provienen de las llamadas “Guerras de las flores”, que eran batallas planificadas y coordinadas en las que los guerreros “Águila” y los guerreros “Jaguar”, eran las dos grandes élites.
Los aztecas realizaban ceremonias para ofrecer dichos sacrificios a sus dioses, especialmente a Tláloc y a Huitzilopochtli, quienes tienen sus propios santuarios dentro de la magnífica estructura del Templo Mayor. Hasta el día de hoy, los “tzompantli” (soportes de calaveras) se pueden apreciar en cientos de edificaciones precolombinas en toda Centroamérica.
EL Sol de la Lluvia
El tercer ciclo solar le corresponde a Tláloc, esta vez, el gobernante. Hubo cosechas y sequías en la Tierra, sin embargo, este dios sufrió y de ello dependían los ciclos vitales ya que Tezcatlipoca (TEZ) sedujo y robó a su esposa Xochiquétzal (XOC) así, Tláloc se hundió en una profunda angustia, dejando que la vida vegetal se marchitara y una gran sequía azotara al mundo.
La gente pedía lluvia a pesar del malestar de Tláloc, lo que avivó su ira, lo que avivaba la ira, derivando en una tormenta feroz que arrasó con el mundo entero. Algunas personas lograron huir en forma de pájaros, así terminaría el ciclo del Sol de la lluvia.
Turquesa: una piedra preciosa y agua
Como uno de sus tesoros más valiosos, los aztecas adoraban la exótica piedra que en la actualidad sigue siendo considerada de las más cotizadas: la turquesa.
En La Pluma del Año 2022, encontramos esta piedra preciosa en forma de finos discos en los extremos de la estilográfica, sus tonos azules y verdosos, tan apreciados por los aztecas, sobresalen de piezas emblemáticas como máscaras, cuchillos y escudos, así como su uso durante distintos rituales.
Los aztecas adoraban al dios Xiuhtecuhtli (XIU) como el “Señor Turquesa”. Estaba casado con Chalchiuhtlicue (CHA) diosa de los lagos, ríos y océanos. El agua era el bien más preciado para esta civilización, cuya cultura se considera muy avanzada: construyeron presas, acueductos, sistemas de canales y sembraron islas artificiales llamadas “chinampas” así abastecían a su enorme población con alimentos y agua potable.
El Sol del agua
El cuarto ciclo solar fue gobernado por Chalchiuhtlicue (CHA) esposa de Xiuhtecuhtli (XIU) y Tláloc (TLA). La diosa del agua estaba preocupada por el bienestar de los aztecas. Sin embargo, el traicionero Tezcatlipoca (TEZ) la hirió al alegar que estaba fingiendo su benevolencia para su propio beneficio. Lastimada, Chalchiuhtlicue (CHA) comenzó su venganza que desató 52 años de lluvias que provocaron inundaciones devastadoras ahogando a toda la vida en la Tierra, convirtiendo a todos los seres en peces. Así culminó el destino del cuarto ciclo solar.
El águila y el nopal: origen de la Ciudad de México
El dios Huitzilopochtli decretó que los aztecas debían buscar un nuevo hogar, en algún lugar donde observaran a un águila posada sobre un nopal, devorando una serpiente. Después de 200 años de exploración, vieron la imagen profetizada en un lago pantanoso de Texcoco, tal cual como su dios lo había indicado.
La forma acanalada del capuchón de La Pluma del Año 2022, representa nada más y nada menos que aquel nopal donde el águila se posaría devorando una serpiente.
El sitio donde los aztecas se asentaron alrededor del año 1320 después de encontrarse con la profecía dictada por su dios, es hoy una de las ciudades más emblemáticas del mundo: Ciudad de México.
El Sol Terremoto
Quetzalcóatl (QUE) no aceptaría la destrucción de su pueblo y crearía un nuevo ciclo, donde los aztecas en un inicio realizaban los respectivos sacrificios para obtener cosechas abundantes, sin embargo, se dejaron a su suerte y el pueblo cayó en desgracia, provocando la ira de Huitzilopochtli, que transformó el sol en una masa oscura, seguida de la destrucción del mundo por un potente terremoto.
Reliquias que perduran
Una vez que los aztecas encontraron el sitio profetizado para establecerse en el lago de Texcoco, fundaron su ciudad a la que llamarían “Tenochtitlán”. Aliándose con Mexicas y otros pueblos, establecerían uno de los imperios más poderosos jamás antes vistos: el Imperio Azteca en el siglo XIV, que duró hasta su conquista por los españoles en 1521.
Tenochtitlán y el murmullo de los aztecas prevalecen hasta nuestros días, basta con posar la mirada en los recovecos del Templo Mayor o al centro del lábaro patrio mexicano, donde con fuerza y determinación sobresale un águila posada en un nopal, devorando una serpiente.
Los Aztecas
La Pluma del Año 2022
Datos técnicos sobre la estilográfica
Introducción y entrega A partir del 02 de mayo del 2022 Materiales Recubrimiento de carbono tipo diamante Punto Plumín Magnum de oro de 18 quilates con revestimiento de rutenio negro Medidas de punto M, F, B, BB Mecanismo De émbolo Peso Aprox. 83 g Longitud Aprox. 135.6 mm Producción 375 piezas
Los Aztecas
La Pluma del Año 2022
Datos técnicos sobre la versión roller
Introducción y entrega A partir del 02 de mayo del 2022 Materiales Recubrimiento de carbono tipo diamante Punto Formato Magnum, ruby ball, M Peso Aprox. 85 g
Longitud Aprox. 135.6 mm Producción 125 piezas